Estándar MyMicrobiome 22.10 – Microbioma del pie

Garantiza la pureza microbiológica del producto para el cuidado de los pies. Se examina para detectar contaminación por mesófilos y microorganismos aeróbicos, es decir, bacterias, levaduras o mohos (TAMC y TYMC). El valor límite es ≤ 1 x 10 ³ ufc/g o ml  y, por tanto, se elige de forma muy estricta.

Se cultiva un cocultivo con los microbios cutáneos más comunes, S. epidermidis , y el germen dañino S. aureus . El cocultivo se expone al producto durante un cierto período de tiempo y luego se realiza una comparación con el grupo de control no tratado. El equilibrio no debe cambiar a favor de S. aureus bajo la influencia del producto.

Se cultivan los microbios típicos del microbioma del pie ( S. hominis, S. warneri, S. epidermidis, M. luteus, M. globosa y C. Tuberculostearicum ). Se expone un cocultivo al producto que se va a probar y se compara el cambio en la diversidad con el grupo de control no tratado. La diversidad del microbioma del pie debe mantenerse en términos de los microbios clave más importantes.

Un producto para los pies respetuoso con el microbioma no sólo debe mantener la diversidad, sino que tampoco debe ser perjudicial para el crecimiento de los microbios. La prueba simula el contacto con la piel en un modelo. Primero, cada germen clave se pone en contacto directo con el producto para el cuidado de los pies. En otro método, el germen se cubre con una capa de agar y se aplica sobre él el producto a analizar. Esto simula la posible penetración del producto de cuidado en capas más profundas de la piel. El crecimiento celular de ambos métodos se compara con el del grupo de control no tratado; el crecimiento no debe verse influenciado significativamente.